sábado, 26 de octubre de 2013

Ser Obispo es un servicio y no un honor, dice el Papa en su primera ordenación episcopal

 
VATICANO, 24 Oct. 13 / 12:43 pm (ACI/EWTN Noticias).- En la primera ordenación episcopal que ha presidido en sus poco más de siete meses de pontificado, el Papa Francisco explicó que el Episcopado, el ser Obispo, es un servicio y no un honor.
Así lo indicó esta tarde (hora local) en la homilía de la Misa de ordenación episcopal de Mons. Jean-Marie Speich, Nuncio Apostólico in Ghana, y de Mons. Giampiero Gloder, Presidente de la Pontificia Academia Eclesiástica.
El Santo Padre ha leído la homilía ritual prevista para estas Misas y ha añadido algunas de sus reflexiones: "en cuanto a ustedes, Jean Marie y Giampiero, elegidos por el Señor, mediten sobre el hecho que han sido elegidos entre los hombres y para los hombres, han sido constituidos en las cosas que tienen que ver con Dios. ‘Episcopado’, de hecho, es el nombre de un servicio, no de un honor".
Al Obispo, explicó el Papa, "le compete más servir que dominar, según el mandamiento del Maestro ‘que el más grande entre vosotros, se haga el más pequeño. Y quien gobierna sea como aquel que sirve’". "Siempre en servicio, siempre el servicio", agregó el Santo Padre.
El Pontífice retomó luego la homilía ritual y dijo: "anuncien la Palabra en toda ocasión: oportuna y no oportuna. Amonestan, alienten y exhorten con toda magnanimidad y doctrina. Y mediante la oración y el ofrecimiento del sacrificio por vuestro pueblo, obtengan de la plenitud de la santidad de Cristo la multiforme riqueza de la divina gracia".
Francisco, regresó luego a su propia reflexión y resaltó que la importancia de la oración: "recuerden que el primer conflicto en la Iglesia de Jerusalén, cuando los obispos tenían mucho trabajo para custodiar a las viudas, los huérfanos decidieron nombrar a los diáconos. ¿Para qué? Para rezar y predicar la Palabra. Un Obispo que no reza es un Obispo a mitad de camino. Y si no reza el Señor termina en la mundanidad".
Retomando la homilía ritual el Papa alentó a que sean fieles custodios y dispensadores del misterio de Cristo, a que conozcan a sus ovejas y tengan cercanos a los sacerdotes y diáconos que son sus colaboradores "con amor de padre y hermano".
El Santo Padre animó a "amar a los pobres, a los indefensos y a cuantos necesitan de acogida y ayuda. Exhorten a los fieles a cooperar en el esfuerzo apostólico (…) y tengan viva atención por cuantos no pertenecen al único rebaño de Cristo, porque ellos también les han sido confiados en el Señor".
El Papa pidió que "recen mucho por ellos" y animó a "recodar que en la Iglesia Católica, por el vínculo de la caridad están unidos al Colegio de los obispos y deben llevar en ustedes la solicitud de todas las Iglesias, socorriendo generosamente a aquellas que necesitan más ayuda. Y vigilen con amor sobre toda la grey en la cual el Espíritu Santo los pone a regir la Iglesia de Dios".
"Velen en el nombre del Padre, de quien hacen presente la imagen; en el nombre de Jesucristo, su Hijo, por quien son constituidos maestros, sacerdotes y pastores. En el nombre del Espíritu Santo que da vida a la Iglesia y con su potencia sostiene nuestra debilidad. ¡Así sea!", concluyó.