domingo, 18 de diciembre de 2011

4to. DÍA DE LA NOVENA AL NIÑO DIOS

Día 4: La estrella de Belén


Hoy vamos a rezar el cuarto día de Novena al Niño Dios.



Nos preparamos para que todos juntos recemos la oración para todos los días.


Oración a Ntra. Sra. Del Pesebre
(Mons. Pironio)


“Señora del Pesebre de Belén,
aquí estamos junto a ti, es la espera
de la noche del silencio y de la Luz.
Silencio que nos permite escuchar a Dios,
Luz que ilumina nuestras vidas
y nos devuelve la alegría de vivir.

Señora del Amor y de la Paz,
que esta Navidad sea el comienzo
de una nueva claridad.
Que el Amor sustituya la violencia,
y que la justicia engendre la verdadera paz.

Ayúdanos a gritarle a los que odian
Que Dios es Padre y nos ama:
Y a los que tienen miedo y están desanimados,
que Dios está con nosotros y nos acompaña.

Que en esta Navidad nazca de nuevo Jesús,
para nuestra familia y para todos.
Para nuestro barrio y nuestro pueblo,
para nuestra patria y para el mundo entero
Jesús nació el 25 de Diciembre, hace 2011 años.
Así podremos anunciar también nosotros:
“Nos ha nacido el Salvador,
Que es Cristo, el Señor”. Amén

Canto


Vamos a incorporar en el pesebre la Estrella de Belén.


La estrella anunció el nacimiento del Mesías. La estrella de Belén no es cualquier estrella en el cielo, es el signo que guía hasta encontrar al Salvador que ha nacido, pero solamente pueden darse cuenta de ello los que miran el mundo con ojos que buscan al verdadero Dios. De esta manera, hay muchos detalles en nuestras vidas que nos pueden indicar a este mismo Salvador. No hace falta que sea una estrella de Belén, pero sí que tengamos los ojos y el corazón bien abiertos para que podamos descubrir aquello que nos guía a Jesús.

En profundo silencio y con mucha atención, vamos a escuchar la Vos de Dios, a través de la Lectura de la Santa Biblia.

Lectura Bíblica. (Ap 22,12-17)


Meditación:

Jesús es la luz, es la estrella radiante de la mañana, es quien nos enseña el rostro del Padre. Su presencia ilumina toda nuestra vida y nos convierte en signos radiantes de su alegría para que los demás nos vean como esas estrellas que guían hasta Él.

¿Verdaderamente siento a Jesús como la luz de mi vida?

¿Soy estrella radiante para los demás o mi vida es opaca, triste, sin reflejar a Jesús?


Incorporamos la estrella en el pesebre.

Pedimos a los niños que en su casa construyan sus estrellas de Belén para el pesebre que preparan en sus casas y también las podemos exponer.


Canto