"Sed humildes de corazón"
Cuando
el Corazón de Jesús quiso enseñarnos algo de sí mismo, lo dijo con una sola
frase: “Aprended de mí que soy Manso y Humilde de Corazón". Debe tener, pues,
un gran significado esta humildad si Jesús la estimó de tal manera, hasta
anteponerla a todos las demás virtudes. ÉL recomienda la castidad, la caridad,
la obediencia, pero ninguna de estas virtudes da el privilegio que da a la
humildad con estas palabras: “Aprended de Mí que soy Manso y Humilde de Corazón”.
Los Santos comprendieron bien esta sublime doctrina y no buscaron la santidad
sino por medio de la humildad, persuadidos de que la humildad es el fundamento
de todas las virtudes, el principio de toda gloria. La misma Virgen confiesa
haber recibido insignes favores del Señor porque ÉL vio “La humildad de su
Esclava”.
*Breve
Silencio*
Corazón
de Jesús, crea en mí un corazón puro, renueva en mi interior un firme espíritu.
-Ten piedad de nosotros.
Corazón
de Jesús, no me rechaces lejos de tu rostro ni me retires tu Espíritu Santo.
-Ten piedad de nosotros.
Corazón
de Jesús, dame tu salvación que regocija, y que un espíritu noble me de
fuerzas.
-Ten piedad de nosotros.
Jesús le pide a Santa Margarita, la Devoción
Origen de la
Devoción
Promesas del Sagrado Corazón
Oración para después de cada una de las comuniones
de los nueve primeros viernes
Acto de Consagración al Sagrado Corazón de Jesús