Viernes: Día penitencial en recuerdo de la muerte de Jesucristo; en estos días, salvo que coincidan con una solemnidad, los bautizados con uso de la razón deben guardar abstinencia de carne o hacer algún gesto penitencial según lo determine la Conferencia Episcopal del país. La Conferencia Episcopal Argentina, reguló la práctica de la abstinencia: "... se retiene la práctica penitencial tradicional de los viernes del año consistente en la abstinencia de carnes; pero puede ser substituida, según libre voluntad de los fieles por cualquiera de las siguientes prácticas: abstinencia de bebidas alcohólicas, o una obra de piedad, o una obra de misericordia".
El Derecho Canónico nos dice:
Canon 1251: Todos los viernes, a no ser que coincidan con una solemnidad, debe guardarse la abstinencia de carne, o de otro alimento que haya determinado la Conferencia Episcopal; ayuno y abstinencia se guardarán el miércoles de Ceniza y el Viernes Santo.
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Vía Crucis, significa “Camino de la Cruz”, o “Camino del Calvario”
Es una práctica piadosa que la Iglesia nos invita a rezar sobre todo en Cuaresma; podemos meditar la Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesucristo, todos los días viernes del año, o cualquier día del mes, mejor aún si lo hacemos a las tres de la tarde, la Hora de la Misericordia, rezando a continuación la Coronilla de la Divina Misericordia.
Vía Crucis por los sacerdotes
Dios Padre todopoderoso, con la gracia del Espíritu
Santo, quiero acompañar a tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo, Sacerdote y
Víctima, en el camino de la cruz y contemplar su ofrecimiento y entrega, su
sacrificio y consagración para la santificación de los sacerdotes. Escucha mi
oración por ellos y por cuantos se preparan para la ordenación sacerdotal, para
que se ofrezcan y se entreguen, se sacrifiquen y se santifiquen y sean
consagrados como “otros cristos”, y para que tu Iglesia reciba por medio de ellos
vida y santidad. Por Jesucristo, Nuestro Señor. Amén.
I ESTACIÓN:
Jesús, condenado a muerte
Señor, hoy eres condenado en aquellos sacerdotes que
son llevados al desprecio y algunos hasta la muerte. Concédeme que pueda
reparar los ultrajes que recibes en ellos mostrando respeto, obediencia y amor
al sacerdocio que les has confiado. Padre nuestro – Ave María - Gloria
II ESTACIÓN: Jesús carga con la cruz
Al abrazar la cruz asumiste la carga que habrían de
llevar tus sacerdotes. Señor, que su cruz le resulte soportable, gracias a ti y
a la tuya, puesto que la cruz es y será siempre marca y garantía del sacerdocio
que fue consumado en tu cruz y que se cumplirá en ellos. Padre nuestro – Ave María
- Gloria
III
ESTACIÓN: La primera caída
Bajo el peso del madero y oprimido contra el suelo, te
levantas, Señor. No dejes caer a tus sacerdotes, cargados también con nuestras
miserias. Alienta sus desfallecimientos y protege a cuantos se disponen a
recibir el sacerdocio para que lleguen contigo hasta el altar. Padre Nuestro –
Ave María - Gloria
IV ESTACIÓN:
Jesús encuentra a su Madre
Madre, tu mirada alivió el sufrimiento de Cristo
Sacerdote que subía hasta el Calvario. Haz que nuestra vida santa estimule a
los sacerdotes en su fidelidad y que los seminaristas se mantengan en su
vocación bajo tus ojos misericordiosos. Padre Nuestro – Ave María - Gloria
V ESTACIÓN: El
Cireneo ayuda a Jesús
Buscaron a uno que te ayudara a llevar la cruz hasta
el final. Señor, que cuando el peso de su cruz oprima a tus sacerdotes hasta
sentir que no pueden llegar hasta el final, concédenos cargar también nosotros
con la cruz y llegar todos hasta tu altar. Padre Nuestro – Ave María - Gloria
VI ESTACIÓN: La Verónica enjuga el
rostro de Jesús
La
mujer que enjugó tu rostro se quedó con tu “verdadero icono” entre sus manos.
Como tú eres figura del Padre, los sacerdotes son imagen tuya en la Iglesia.
Jesús, que nuestra oración les ayude a configurarse contigo, y marca tu imagen
también en nuestro corazón. Padre Nuestro – Ave María - Gloria
VII ESTACIÓN: La segunda caída
Señor,
de nuevo caes bajo el peso de la cruz y de nuestros pecados. Pero con amor te
levantas con la presteza del buen pastor. Que tu fortaleza, y la confianza que
ellos han puesto en ti, levante siempre a tus sacerdotes ya que tú te has fiado
de ellos. Padre Nuestro – Ave María - Gloria
VIII ESTACIÓN: Jesús consuela a las
mujeres
A
pesar del sufrimiento y de la aflicción, te olvidas de ti mismo para confortar
a aquellas madres y mujeres que sentían compasión por ti. Señor, único Maestro,
que tus sacerdotes alcancen el olvido propio a favor de la porción de la
Iglesia que se les ha encomendado. Padre Nuestro – Ave María - Gloria
IX ESTACIÓN La tercera caída
Una
vez más caes por tierra. Oh Jesús, cuando tus sacerdotes, fatigados y cansados
por el esfuerzo apostólico, no puedan más, acuérdate de ellos para que, otra
vez de pie, te sigan cada vez más de cerca. Recibe mi vida por ellos para que
lleguen contigo hasta el Calvario. Padre Nuestro – Ave María - Gloria
X ESTACIÓN: Jesús es despojado de sus
vestidos
Te
despojaron de tus vestidos, lo último que tenías. Señor, que los sacerdotes,
como verdaderos discípulos tuyos, desprendidos y generosos en su vida, con tu
palabra, en el culto y la santificación y con el cuidado pastoral santifiquen a
sus hermanos. Padre Nuestro – Ave María - Gloria
XI ESTACIÓN: La crucifixión
Has
extendido dócilmente tus brazos sobre la cruz, que es expresión de tu amor y
nuestro signo de salvación. Concede, Señor, a tu Iglesia, santos y sabios
sacerdotes que nos estimulen de palabra y obra a apreciar y agradecer la cruz
para la redención del mundo. Padre Nuestro – Ave María - Gloria
XII ESTACIÓN: Muerte de nuestro Salvador
Cristo,
Sumo Sacerdote, en el altar de la cruz, has consumado tu ofrenda y has dado tu
vida para que tengamos vida. Que tus sacerdotes transmitan tu vida al mundo, al
participar de tu único sacerdocio. Dales la gracia para que sepan y quieran
inmolarse cada día contigo. Padre Nuestro – Ave María - Gloria
XIII ESTACIÓN: Descendimiento de la cruz
En
tus manos virginales, Madre de Cristo Sacerdote, es depositada la Víctima
inmolada, nuestro Señor, pastor y cordero. Guarda, Madre, a tus hijos
sacerdotes, hasta que, consumado el sacrificio de sus vidas, puedas acogerlos y
presentarlos, con Cristo, ante el Padre. Padre Nuestro – Ave María - Gloria
XIV ESTACIÓN: Sepultura
Señor,
tu Cuerpo queda en el sepulcro en la espera de la resurrección que llena de
Vida y Santidad, la Pascua de la nueva creación. Que tus sacerdotes dejen con
su vida una estela de gracia y de santidad para que podamos llegar hasta ti en
la gloria. Padre Nuestro – Ave María - Gloria
ORACIÓN FINAL
Oh
Jesús, Sacerdote eterno que te ofreciste en la cruz al Padre como Víctima
propiciatoria para nuestra redención y continúas ofreciéndote en el altar por
medio de tus sacerdotes, santifícalos en la verdad para que, unidos a ti,
Sacerdote y Víctima, en su servicio a la Iglesia nos santifiquen para gloria de
Dios. Amén.