Hoy, pídele al Espíritu Santo, confiar en el don de la evangelización que reside en ti.
Espíritu de Dios, hoy te pido una vez más, ser liberado de toda excusas que me lleva a encerrarme en mi mismo, para no compartir lo que de ti he recibido.
A mi alrededor, hay tantas personas que, aunque hacen críticas hacia ti y hacia la Iglesia que fundaste , están necesitados de empezar a morar en ella y a alimentarse de los manjares de bendiciones que tú les tienes preparados para saciar sus corazones.
Hoy te digo, Espíritu Santo, aquí estoy, envíame a mí. Me ofrezco para ser tu portavoz, para darte a conocer a todos aquellos que pondrás en mi camino a lo largo de este dia.
Tengo la certeza de que, en esos momentos, tú estarás en mí, poniendo tus pensamientos en mi mente, tu amor en mi corazón, tus palabras en mis labios y la capacidad de comprender lo que está viviendo el otro.
Por anticipado te doy gracias por los corazones que con tu ayuda podré llevar hasta Jesucristo. Amén