quiero darte gracias porque nos das a “San Martín de Porres”,
como modelo de vida y como intercesor,
para imitar sus virtudes y contar con su ayuda.
Danos un corazón simple y humilde
como el de “San Martín de Porres”,
un corazón generoso, para que podamos como El,
vernos libres de los rencores que enferman,
amando a todos nuestros hermanos, y,
que seamos así,
instrumentos de Tu Paz y constructores de la civilización del Amor.
Amén.