Hoy, pídele al Espíritu Santo que te guíe durante todo este mes.
Espíritu Santo, hoy te consagro todo este mes de diciembre, abriéndome a tu llamado sagrado de elevar el nivel de mi conciencia y del mundo por medio de un mes en que la oración ocupe un lugar importante.
Me entrego al comenzar mi oración y este mes para ser liberado de toda pesadez, preocupación o tensión.
Ahora quiero respirar profundamente y respirar tu presencia viviendo en mi y llegando a todos los rincones de mi ser; colmándome de tu presencia morando conmigo y trayéndome vida nueva, energía, entusiasmo, paz y poder espiritual.
Guíame para dirigir la atención hacia mi interior y haz que fluyan en mi mente las palabras que Jesús dijo con autoridad al viento y al mar: "Calma, aquiétense". Haz que estás palabras me acompañen durante todo este mes, especialmente, cuando haya alguna tormenta. Amén