Las intenciones del Papa Francisco para el mes de febrero, dedicadas a los encarcelados, sobre todo a los jóvenes, y a los cónyuges separados.
La intención universal del apostolado de la oración del Santo Padre es:
“Para que los encarcelados, en especial los jóvenes, tengan la posibilidad de reconstruir una vida digna”.
Su intención evangelizadora es:
“Para que los cónyuges que se han separado encuentren acogida y apoyo en la comunidad cristiana”.