viernes, 4 de julio de 2014

Primer viernes del mes de Julio: Hora Santa al Sagrado Corazón de Jesús



   
Canto     -    Exposición del Santísimo Sacramento

Celebrante: ¡¡¡ Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento!!!

Guía 1: Sea por siempre bendito y alabado Jesús Sacramentado.

Queridos Hermanos: Aquí está el Corazón que nos ama más allá de los abatimientos de Belén y Nazaret.  Más allá de la crucifixión del cuerpo y del alma del Calvario.  Este es el Corazón que nos ha amado hasta el extremo, hasta la sublime locura; aquí en la Hostia, dejó su inagotable caridad.
Acérquense los tristes, los desengañados, los heridos en el propio hogar, los azotados por la injusticia, los despedazados por la muerte o la desgracia.  Acérquense los desheredados de la dicha, los que arrastran un alma en jirones, los que han saboreado el cáliz de todos los duelos.  Vengan y vean que el torrente de sus desventuras no es sino una lágrima,… apenas una,…del océano que ha vertido su Dios en este calabozo.  Aquí se lo olvida, como jamás olvidaron los más desleales de los amigos.  El nos dice: soy tu Dios, y tú una criatura pecadora, para ti me quedé para siempre en la Eucaristía.  Desde este Tabernáculo, contemplo la caravana inmensa, los millares de redimidos con mi sangre
Creo en ti Señor, pero ayúdame a creer con firmeza, espero en ti, pero ayúdame a esperar sin desconfianza, te amo, Señor, pero ayúdame a demostrarte que te quiero, estoy arrepentido pero ayúdame a no volver a ofenderte.

  CANTO

Guía 2:   Invocación al Espíritu Santo

Ven, Espíritu Santo, y bautízame con el Fuego de tu Amor.  Me entrego a ti,  quiero que me llenes con tu presencia.  Necesito tu poder en mi vida.  Ven y lléname ahora.  Señor, creo que cuando me rindo ante Ti como Señor, nos unimos profundamente.  Ahora me rindo para recibir tus dones de santificación: Espíritu de Sabiduría e Inteligencia; Espíritu de Consejo y Fortaleza; Espíritu de Ciencia y Temor de Dios; necesito dones en mi vida, para mi crecimiento como cristiano.  Sólo en tu poder, guiado por tu Espíritu puede ser fructífera mi vida.

Pausa


Respondemos:   VEN ESPÍRITU SANTO A VISITAR NUESTROS CORAZONES

**Oh Dios, Trinidad que adoro, ayúdame a desentenderme por entero de mí mismo, para instalarme en Ti, inmóvil y pacífico, como si mi alma residiera ya en la eternidad.
**Oh, Dios, Trinidad que adoro, que nada pueda perturbar mi paz ni desligarme de Ti, que a cada minuto, me abisme más profundamente en tu Misterio.
**Oh, Dios, Trinidad que adoro, pacifica mi alma, haz de ella tu morada y el lugar permanente de tu descanso.
**Oh, Dios, Trinidad que adoro, quiero pasar mi vida escuchándote, quiero ser enteramente dócil, para escuchar todo de Tí.
**Oh, fuego devorador, Espíritu de Amor, ven a mí, para que en mí se opere como una nueva encarnación del Verbo en la que El renueve su misterio.

CANTO

Guía 1:   Perdón

Texto Bíblico para reflexionar: Lucas 22 

“Enseguida Jesús salió y fue como de costumbre al monte de los Olivos, seguido de sus discípulos.  Cuando llegaron, les dijo:   Oren para no caer en la tentación.  Después se alejó de ellos, más o menos a la distancia de un tiro de piedra, y puesto de rodillas, oraba:   Padre, si quieres, aleja de  mí este cáliz.  Pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya”.
Palabra de Dios. Te alabamos Señor

Pausa

Corazón de Jesús, la contemplación del amor de tu Corazón, da paso al honor cuando constatamos el enorme daño que nuestros pecados le provocan, representados en la corona de espinas que rodean estrechan, aprisionan y desgarran al Sagrado Corazón en cada latido.  Las espinas son la materialización y representación de todas las especies de pecados de que somos capaces de cometer; desde los más leves, hasta los más aborrecibles.
Permítenos, oh Sagrado Corazón, llorar nuestros pecados, a los pies de la Virgen Dolorosa, para que uniendo nuestras lagrimas a las de Ella, reparemos por nuestros pecados y los del mundo entero.

Respondemos: DIOS MISERICORDIOSO  POR TU BONDAD, POR TU INMENSA COMPASIÓN BORRA MI CULPA Y LIMPIA MI PECADO.

**Para que seamos renovados en la humildad de tu corazón.
**Por el inmenso amor que te llevó a entregar tu vida por nosotros.
**Por el olvido e ingratitud de los hombres.
**Por la soledad en que te dejamos en los sagrarios.
**Por las blasfemias en contra de tu Sacramento del Amor.
**Por nuestra indiferencia y falta de amor ante las necesidades de nuestros hermanos.
**Por todas las veces que pensé que Tú me castigabas mandándome la muerte a mi familia, enfermedades o dificultades financieras y que me hacen sentir ira, resentimiento o amargura hacia Ti.
**Por la persona que más me ha herido en mi vida y que me cuesta perdonar.
**Por todos aquellos a quienes yo he ofendido.

CANTO

Guía 2: Adoración

Jesús adorable, la sed ardiente de amarte y de hacerte amar, nos arrastra irresistible, hasta tus plantas…Y Tú que lo sabes todo, sabes ya, que no venimos a pedirte que nos hagas disfrutar de los resplandores ni de las delicias del Tabor…No venimos a pedirte que te presentes a nosotros como a los tres apóstoles predestinados en la Transfiguración de una majestad de gloria, ¡oh, no!..Otra ambición nos trae y es el que nos reveles, en esta Hora Santa, las bellezas de inmolación y de agonía, las profundidades del dolor de tu Corazón adorable en el patíbulo de la Cruz y en el calabozo en que moras, ¡Oh Dios Sacramentado!...; Ansiamos penetrar en los secretos de tu amor doliente y crucificado…Lo anhelamos pues queremos abrasarnos en las llamas de una caridad más fuerte que la muerte…No nos dejes por más tiempo en los dinteles del Sagrario de tu dulce Corazón…Mira que se hace tarde y que anochece…Acuérdate, que Tú mismo nos invitaste a esta Hora Santa, cuando le pediste a Margarita María…es esta la hora de Gracia por excelencia, ya que en ella ofreciste confiar tus secretos, en retorno de las confidencias de tus consoladores y amigos…confidencias recíprocas que labrarán la eterna intimidad entre tu Corazón y los nuestros.

Respondemos:TE AMAREMOS MÁS TODAVÍA, SEÑOR. ¡HOSANNA AL REY DE REYES!

 **Cuando Tú permitas o mandes que nos torturen las angustias, los tedios y las grandes tristezas.
**Cuando nos asedien penas muy hondas, penas secretas y nos sintamos abandonados y solos.
**Cuando la tormenta rompa lazos muy fuertes o los mejores amigos nos desengañen.
**Cuando el rigor de la justicia, siempre buena y misericordiosa nos fustigue y purifique.
**Cuando el vendaval eche por tierra nuestros proyectos y cuando nos hagas beber el cáliz amargo de la injusticia humana.

CANTO

Guía 1: Alabanza

Eres tan dulce, Jesús-Eucaristía, da una victoriosa luz a tantos ciegos que no quieren ver tus maravillas, ni reconocerte a ti como el Camino…hazlo por tu Madre y por tu Corazón. 
Eres tan tierno, Jesús Eucaristía, da paz a tantos que la buscan extraviados en un mundo que cantando, vende lágrimas y muerte…Sé Tú su esperanza…hazlo por tu Madre y por tu Corazón.
Eres tan compasivo, Jesús Eucaristía, sacia el hambre de amor, de amor inmenso que ha desviado a tantos pródigos…vuélvelos a tu Costado…que reconozcan que Tú, que sólo Tú eres la vida y el amor…Hazlo por tu Madre y por tu Corazón.
Eres tan amoroso, Jesús Eucaristía. Endulza los llantos desesperados de aquéllos que por sufrir las horribles decepciones de la vida, sin el apoyo de tu gracia se han envenenado con sus lagrimas…y se encuentran en un abismo muy distante de los goces de la tierra, y más distantes aún de las delicias de un eterno paraíso…Búscalos, sal a su encuentro con aquellas palabras que hacen estallar torrentes, mares, cielos, de júbilo indecible, en las regiones de la eternidad…hazlo, Jesús, por tu Madre, hazlo por tu Corazón.

Pausa

Respondemos: ALABADO SEA EL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS QUE NOS HA REDIMIDO

**Te alabamos, Señor nuestro Jesucristo, porque hemos conocido tu amor.
**Te agradecemos tus palabras, que nos revelan el amor de tu Corazón.
**Te damos gracias por la fuente de Gracia, que salva hasta la vida eterna.
**Te alabamos Corazón abierto, porque por ti encontramos acceso al eterno Padre.
**Te alabamos, porque has amado a los tuyos hasta el fin.
**Te damos gracias por este amor, que vence incluso a la muerte.
**Te damos gracias por el fuego que has venido a traer al mundo.
**Alabado sea el Sagrado Corazón de Jesús, que nos ha redimido.
**Alabanza y Gloria, Sabiduría y Gracia, Poder y Fortaleza de nuestro Dios por toda la eternidad.

CANTO

Guía 2: Oración a la Virgen María

¡Oh, Corazón de María! El más amable y compasivo de los corazones después del de Jesús, Trono de las misericordias divinas a favor de los miserables pecadores; yo, reconociéndome sumamente necesitado, acudo a Vos en quien el Señor ha puesto todo el tesoro de sus bondades, con plenísima seguridad de ser por Vos socorrido. Tú eres mi refugio, mi amparo, mi esperanza, por eso te digo y te diré en todos mis apuros y peligros:
¡Oh, CORAZÓN DE MARÍA SED LA SALVACIÓN MÍA!

**Cuando la enfermedad me aflija, o me oprima la tristeza o la espina de la tribulación llague mi alma.
**Cuando el mundo, el demonio y mis propias pasiones me persigan con sus tentaciones y quieran hacerme perder el tesoro de la divina gracia.
**En la hora de mi muerte, en aquel momento del que depende mi eternidad, cuando se aumenten las angustias de mi alma y los ataques de mis enemigos.
**Cuando mi alma pecadora se presente ante Jesucristo para rendirle cuenta de toda su vida, ven Tú a defenderla y a ampararla, y entonces, ahora y siempre.

Guía 1: Acción de Gracia

Gracias, amabilísimo Jesús, por el inapreciable beneficio que acabas de hacerme, viniendo a mí y dignándote entrar en la pobre morada de mi corazón.  ¡Oh, Ángeles santos! Alabad todos al Señor y dadle por mí las gracias… ¡Oh, Santos del cielo y justos de la tierra! Ayúdenme a dar a Dios las gracias por tantas bendiciones.
¡Oh, Virgen Santísima!, Vos, que con tanta perfección supiste corresponder a los beneficios que Dios te dispensó, haz que sepa también corresponder y darle las debidas gracias; pero ya que esto me es imposible, dáselas por mí.
¡Oh, cuanto te amo, Dios mío!  ¡Qué lástima que no te haya amado siempre!  Al acordarme que tuve valor para ofenderte, se me cubre el rostro de rubor y un vivo dolor parte mi corazón.  Prometo procurar que todo el mundo te ame y que nadie te ofenda y ya que te contemplo sentado en mi corazón como en un trono de misericordia preparado para concederme gracias, te pido:

Concédenos a todos tu divina gracia, tu santo amor y temor y la gloria en que vives y reinas con el Padre y con el Espíritu Santo.  Amén.

CANTO

Ritos Conclusivos

Se retira el Santísimo Sacramento