Un grupo de 45 internos del Servicio Penitenciario de La Rioja, decidieron donar su almuerzo y su cena del día sábado, para que familias del Barrio Los Obreros, puedan comer.
Carta a nuestros Hermanos del Servicio Penitenciario de La Rioja
Queridos Hermanos en Cristo!
Somos un pequeño grupo de obreros, prestando servicio, en la mies del Señor.
La semana pasada, el Padre Claudio nos contó con un gran orgullo de Pastor, que algunos hermanos alojados en el Servicio Penitenciario de nuestra provincia, decidían donar sus alimentos del día sábado, para alimentar a otros Cristos que viven en el Barrio Los Obreros.
Nos pidió, -como nos pide Jesús-, que nos convirtiéramos en sus manos, sus pies, sus ojos, en fin, sus instrumentos, para que el Acto de Amor y Sacrificio que ustedes hacían, pudiera dar sus frutos.
El sábado, junto al Padre Claudio, retiramos los alimentos del Servicio Penitenciario, los trajimos hasta la Vicaría, los distribuimos en bolsitas y en el nombre de Nuestro Señor, partimos al Barrio que ustedes eligieron para su acto de caridad.
No podemos expresarles con palabras, la alegría de nuestros hermanos que recibieron la donación de los alimentos!!!!!
Guardamos en nuestras retinas y en nuestros corazones los momentos que vivimos, y queremos que ustedes sean partícipes, de este nuestro gozo, por eso les enviamos algunas fotografías y un hermoso regalo que les hacen llegar los niños del barrio.
Ellos quisieron expresar su agradecimiento, con la pureza y la sinceridad de los niños, a través de sus cartitas donde les manifiestan: “GRACIAS POR DONARNOS SU COMIDA PORQUE HOY NO TENÍAMOS PARA COMER”.
Les envían en pequeñas bolsitas, un poquito de yerba, compartiendo con ustedes su pobreza, sacrificándose también ellos, en esa entrega, para que puedan compartir unos mates y en ese compartir, los recuerden y hagan oraciones por ellos.
Las oraciones de ellos los acompañan, el agradecimiento se manifiesta de esa manera y les piden que no abandonen el camino del Señor y que sepan, como les dice Rodrigo en su cartita: DIOS LOS BENDICE.
Ustedes pueden apreciar en las fotografías, las carencias de nuestros hermanos y en la mirada triste de los niños, podrán advertir cuánto hambre tienen!.
Somos un pequeño grupo de obreros, prestando servicio, en la mies del Señor.
La semana pasada, el Padre Claudio nos contó con un gran orgullo de Pastor, que algunos hermanos alojados en el Servicio Penitenciario de nuestra provincia, decidían donar sus alimentos del día sábado, para alimentar a otros Cristos que viven en el Barrio Los Obreros.
Nos pidió, -como nos pide Jesús-, que nos convirtiéramos en sus manos, sus pies, sus ojos, en fin, sus instrumentos, para que el Acto de Amor y Sacrificio que ustedes hacían, pudiera dar sus frutos.
El sábado, junto al Padre Claudio, retiramos los alimentos del Servicio Penitenciario, los trajimos hasta la Vicaría, los distribuimos en bolsitas y en el nombre de Nuestro Señor, partimos al Barrio que ustedes eligieron para su acto de caridad.
No podemos expresarles con palabras, la alegría de nuestros hermanos que recibieron la donación de los alimentos!!!!!
Guardamos en nuestras retinas y en nuestros corazones los momentos que vivimos, y queremos que ustedes sean partícipes, de este nuestro gozo, por eso les enviamos algunas fotografías y un hermoso regalo que les hacen llegar los niños del barrio.
Ellos quisieron expresar su agradecimiento, con la pureza y la sinceridad de los niños, a través de sus cartitas donde les manifiestan: “GRACIAS POR DONARNOS SU COMIDA PORQUE HOY NO TENÍAMOS PARA COMER”.
Les envían en pequeñas bolsitas, un poquito de yerba, compartiendo con ustedes su pobreza, sacrificándose también ellos, en esa entrega, para que puedan compartir unos mates y en ese compartir, los recuerden y hagan oraciones por ellos.
Las oraciones de ellos los acompañan, el agradecimiento se manifiesta de esa manera y les piden que no abandonen el camino del Señor y que sepan, como les dice Rodrigo en su cartita: DIOS LOS BENDICE.
Ustedes pueden apreciar en las fotografías, las carencias de nuestros hermanos y en la mirada triste de los niños, podrán advertir cuánto hambre tienen!.
Con el gesto de amor que ustedes hicieron, se cumple la Palabra del Señor cuando dice: ¡TUVE HAMBRE Y ME DISTE DE COMER!.
El Padre Claudio siempre los tiene presentes en sus conversaciones, en sus homilías, y nos hace reflexionar sobre las gracias que el Señor derrama donde nuestro Dios Quiere y sobre todo, cómo la Misericordia de Dios se manifiesta allí donde abunda el pecado. El Padre nos dice, “Donde abunda el pecado abunda la Gracia”.
Ustedes nos enseñaron que los muros que los separan de los hermanos que más necesitan, no son obstáculos para que el Amor y la Solidaridad, triunfen sobre el egoísmo y la maldad!.
Están en nuestras oraciones y les pedimos que oren también por nosotros, porque, a pesar de no estar privados de la libertad, tenemos heridas en el Alma que nos mantienen cautivos!!!!.
Gracias, porque el Amor de ustedes nos hizo instrumentos del Amor del Señor!
Un Abrazo en nuestra Madre de Luján, Patrona de Cáritas, y en nuestro Patrono San Martín de Porres!
Cáritas “San Martín de Porres”
